Esta semana Prime Video estreno la serie francesa “Escort Boys”, una tragicomedia que bucea en las aguas turbias de la prostitución masculina en la Camargue, donde los protagonistas comercian con su físico bajo la batuta de la hermana de uno de ellos, quien hace las veces de proxeneta. La intención parecía ser la de cuestionar y desmontar los estereotipos de género, sin embargo, este intento resulta no tan certero y hasta con un tinte retrógrado bien marcado.
La historia se despliega en torno a Ben y su hermana Charly, quienes se ven abrumados por una herencia de deudas tras la muerte de su padre. Simultáneamente, sus amigos Matthias, Zack y Ludo también se enfrentan a sus propios dilemas. Matthias, experimentando con el mundo del escort masculino, ofrece una atrevida solución que sus compañeros están dispuestos a considerar.
El viaje íntimo de estos hombres, vendiendo placer para saldar cuentas pendientes, los lleva inesperadamente a un camino de autoconocimiento y crecimiento. A medida que se sumergen en este inusual emprendimiento, cada encuentro amoroso se convierte en una inesperada lección de vida. Desde la lucha por encontrar un empleo digno, restaurar los lazos con la pareja, recuperar el legado del negocio familiar, hasta cuidar de una madre enferma; el contacto humano revela ser más enriquecedor que el mero intercambio monetario. La serie plantea una paradoja: en la búsqueda de soluciones económicas se descubren tesoros emocionales y vitales.
En “Escort Boys”, el elenco masculino no son solo cara bonitas y cuerpos musculados, la actuación de Guillaume Labbé de “Plan Cœur” resalta junto a Simon Ehrlacher, Corentin Fila y Thibault Evrard. Pero no solo se destacan ellos, también hay un elenco femenino de lujo que resulta conocido de otras producciones. Estrellas como Carole Bouquet, Rossy de Palma y Amanda Lear, entre otras, enriquecen cada capítulo. Además, los nostálgicos de las series juveniles del 2000 celebrarán a Kelly Rutherford. Una constelación de talentos que brillan en este drama de seducción y misterio.
La serie cuenta con la mirada acertada detrás de cámara del director Ruben Alves. A través de sus seis episodios breves de media hora, es quien adaptó con libertad la serie israelí “Johnny and the Knights of the Galilee”, de Dani Rosenberg y Tom Shoval. Esta serie no peca de original pero presenta un puñado de personajes atractivos no solo físicamente sino también por la posibilidad que brinda de reflexionar e interpelar con delicadeza la estructura patriarcal de la actual sociedad.
Además destaca con valentía las sexualidades femeninas y enfrenta con candor la lucha contra el sexismo y la discriminación por edad. La serie de seguro no es la mejor del 2023, pero se deja ver y entretiene, y hasta para muchos espectadores “Escort Boys” promete dejar una huella indeleble en la discusión contemporánea sobre los roles de género.